En este
blog más muerto que vivo, hay veces que
siento la necesidad de expresar determinados sentimientos carnavaleros por lo
que en mi suponen.Pues bien, hoy es uno de esos días…
Hay
decisiones importantes que marcan el devenir de los acontecimientos; las hay de
todo tipo, acertadas, erróneas, difíciles, seguras,…etc, etc,
etc…y en esto del carnaval uno se ve en
la obligación constante de tomar determinaciones de todos los colores…
Hace 5 años
tuve la infinita suerte de tomar una fantástica decisión que se ha traducido
en una de las experiencias más
gratificantes de mi vida carnavalera (por ende de mi vida). Decidí hacerme
cargo de una nueva agrupación de chavales a los que en su inmensa mayoría no
conocía de nada. La toma de contacto recuerdo que fue tibia, creo que no nos
convencíamos 100% mutuamente, jajaja… yo pensaba “menuda panda de húngaros”, en
cuanto a vosotros, a saber lo que
pensaríais de un servidor…
Apostasteis
por mí, y yo me tiré al barro con vosotros sin saber cuánto bueno nos deparaba
el futuro ya pasado.
Pues bien, aunque viniendo de largo y siendo un secreto a
voces, como todos sabéis en estos últimos días (en contra de mi sentir) me he visto en el deber de tomar y transmitiros la decisión antagónica y ponerle un
punto (espero que aparte) a tanto y bueno. Son muchas las razones que hacen que
en estos momentos no me vea con fuerzas de continuar a la altura que merecéis, y
por respeto hacia vosotros y vuestros merecimientos no me queda otra opción más
justa que la de parar ahora.
Lo que
tenéis que saber lo sabéis, pero quiero
que quede constancia del cariño tan grande que os tengo, de lo orgulloso que me
siento de vosotros, quiero hacer gala y brindar por la gran amistad que nos
une, así como hacer pública la
admiración que en mi habéis levantado durante estos años.
Os doy las
gracias por lo mucho que me habéis aportado este tiempo (y seguiréis
aportándome) y tanto que me llevo. Ha sido muchísimo trabajo pero vosotros sois
de esos grupos que hacen que merezca la
pena.
Espero que
nada ni nadie os cambie, que mantengáis/mejoréis en todos los ámbitos y no se
os olvide “la escuela” que se os ha
intentado inculcar (en la que tanto habéis evolucionado).
Espero
también que no “enferméis de carnaval” con el paso de los años, así como con
los inevitables cambios que os depare el tiempo y eso afecte un ápice a nuestra
amistad o a la confianza que mantengo con vosotros (no me imagino dirigiéndome
a vosotros como algo ajeno a mí por el hecho de que otra persona me sustituya…
no quiero ser nunca un extraño en vuestra casa).
Y quien
sabe…como le dije a uno de vosotros, con esto no cierro cerrar una puerta, solo
entornarla de momento…
Veros crecer
(en todos los sentidos) ha sido una experiencia única (lo seguiré haciendo de
otra forma).
(Millones de gracias)
Os deseo lo
mejor de todo corazón y como no...nos vemos en los bares.
(Fotos: Miguel Tejada, JASA, Fran Vergara )
Saludos murgueros.